Sebastián es un hombre normal de unos treinta y tantos años, devoto a su perro leal, que trabaja en varios trabajos temporales. En la medida que se mueve de manera irregular a lo largo de la edad adulta, navega por el amor, la pérdida y paternidad, hasta que su mundo es sacudido por una catástrofe repentina que pone al revés su ya turbulenta vida.
Fotografiado en imágenes escuetas de blanco y negro e inundado de metáforas reflexivas, la escritora y directora Ana Katz captura la madurez y vida de Sebastián de manera específica y universal, mientras lucha para adaptarse a un mundo que está en constante cambio –y que puede estar llegando a su fin–.